En las zonas de conflicto, las investigadoras de campo, con su capacidad para acceder a espacios exclusivos para mujeres, generar confianza en las comunidades y llevar a cabo una recogida de datos imparcial, contribuyen a una investigación más eficaz, sobre todo en cuestiones relacionadas con las mujeres y los niños.

En las zonas de conflicto, donde cada dato puede ser un salvavidas, las investigadoras de campo y las encuestadoras no sólo contribuyen, sino que son decisivas para el cambio. Su contribución va más allá de la recopilación de datos: aportan ideas esenciales que impulsan estrategias de desarrollo y resolución de conflictos eficaces y sensibles a las cuestiones de género.

A pesar de enfrentarse a retos únicos, estas mujeres sortean los desafíos de las zonas afectadas por conflictos con resiliencia, sacando à la luz los impactos matizados de la guerra, la fragilidad y la inestabilidad en las poblaciones vulnerables. Este blog subraya el papel fundamental de las investigadoras sobre el terreno en las zonas de conflicto, destacando sus ventajas únicas, la necesidad de una investigación sensible a las cuestiones de género y los sistemas de apoyo críticos necesarios para amplificar su impacto.

Por qué las investigadoras de campo son cruciales para la investigación de conflictos

La investigación sobre conflictos ha estado dominada durante mucho tiempo por voces masculinas. Pero para tener una imagen completa, falta una perspectiva crítica: la de las investigadoras de campo. Las investigadoras de campo aportan un conjunto único de habilidades y experiencias que descubren aspectos ocultos de los conflictos:

  • Acceso a espacios exclusivos para mujeres: Algunas culturas restringen el acceso de los hombres a determinados espacios. Las encuestadoras pueden salvar esta distancia, recopilando información crucial de las mujeres en entornos segregados como hogares, centros comunitarios o instituciones religiosas. Este acceso permite obtener una imagen más completa del impacto del conflicto, especialmente sobre las mujeres y las niñas.Por ejemplo, durante una investigación sobre el acceso à la atención sanitaria en las zonas rurales de Afganistán, las investigadoras pudieron entrevistar directamente a las mujeres sobre sus experiencias con los servicios de salud materna dentro de sus hogares, un espacio inaccesible para los investigadores masculinos. Estos datos revelaron importantes barreras culturales a las que se enfrentaban las mujeres à la hora de buscar asistencia, lo que permitió mejorar los programas de divulgación de las iniciativas de salud de la mujer.
  • Crear confianza con las comunidades: A menudo, las investigadoras pueden establecer una relación de confianza más fácilmente con las comunidades, especialmente en aquellas en las que la violencia ha afectado desproporcionadamente a las mujeres. Las experiencias compartidas de dinámicas de género pueden crear una relación que fomente la comunicación abierta y la sensación de seguridad de los participantes. Por ejemplo, las investigadoras estarían más capacitadas para tratar con mujeres o niñas cuestiones de acoso sexual y seguridad.
  • Recogida de datos imparcial: Los sesgos inconscientes pueden introducirse en investigaciones realizadas exclusivamente por hombres. Las investigadoras aportan una perspectiva diferente, que puede revelar cuestiones específicas de género que, de otro modo, podrían pasarse por alto. Esto favorece una comprensión más matizada del impacto del conflicto en las comunidades vulnerables.

Enumerator Insight: Reflexiones de Amina Hussaini

Amina Hussaini, encuestadora de la provincia afgana de Ghor, distrito de Taiwara, que trabaja con Adroit Associates, comparte un recuerdo de su trabajo de campo que resume los altibajos de realizar encuestas en zonas de conflicto. Uno de mis mejores recuerdos de esta encuesta es que una vez fui a un pueblo y un hombre mayor insistió en que le hiciera una foto con su mujer y la publicara en algún sitio”, recuerda. Obligada, Amina utilizó su teléfono para hacer la foto, lo que supuso una inmensa alegría para el hombre. Sin embargo, sus experiencias no estuvieron exentas de dificultades. Reflexiona sobre un hecho sombrío: Mi recuerdo más desagradable de la encuesta fue cuando me di cuenta de que, debido à la mala situación económica de la gente, no tenían acceso a los medios de comunicación para llamar la atención del mundo sobre sus necesidades; me entristeció mucho”.

Este relato ilustra vívidamente la doble naturaleza de la investigación de campo en estas zonas: la oportunidad única de conectar profundamente con las personas y, al mismo tiempo, enfrentarse à la dura realidad de sus vidas. Las experiencias de Amina ponen de relieve el papel fundamental que desempeñan las encuestadoras para colmar las lagunas no sólo en la recopilación de datos, sino también en la conexión humana y la empatía.

Más allá de esto, las investigadoras sobre el terreno ofrecen una comprensión más profunda del impacto del conflicto, especialmente en las poblaciones vulnerables.Las investigadoras suelen estar muy atentas a las necesidades específicas de las mujeres y los niños, y pueden detectar problemas como la falta de acceso a servicios de guardería, educación o salud mental, que los investigadores masculinos podrían pasar por alto.

También pueden conocer mejor las normas y sensibilidades culturales, lo que les permite desenvolverse con mayor eficacia en situaciones de investigación y recopilar datos culturalmente pertinentes. Si una investigadora descubre que las mujeres dudan en hablar de ciertos temas delante de investigadores masculinos debido a las normas culturales, puede realizar entrevistas separadas con mujeres para recopilar datos más precisos.

Jirga abierta
Fuente: Adroit Associates

Contribuciones a los esfuerzos de recuperación y à la elaboración de políticas

La necesidad de enfoques que tengan en cuenta las cuestiones de género en la investigación de conflictos es innegable. Garantizan que las necesidades y experiencias específicas de las mujeres y las niñas no sólo se tengan en cuenta, sino que influyan activamente en el programa de investigación. Las investigadoras están en primera línea, garantizando que las metodologías de investigación estén diseñadas para captar con precisión los datos específicos de género. En contextos como Siria, donde el conflicto ha afectado de manera desproporcionada a las mujeres, las iniciativas de investigación dirigidas por mujeres han sido fundamentales para adaptar las respuestas humanitarias a fin de abordar cuestiones como el desplazamiento y el acceso à la atención sanitaria.

Las investigadoras sobre el terreno garantizan una recogida de datos sensible. Hacen preguntas concretas, como las opciones de guardería para los programas de formación laboral, o el acceso a productos de higiene que a menudo pasan por alto los investigadores masculinos. Generar confianza con las mujeres les permite descubrir realidades ocultas: el miedo à la violencia al ir a buscar agua o los malos tratos domésticos que los hombres no ven. Este enfoque conduce a programas de recuperación más eficaces.

La ausencia de una recopilación de datos que tenga en cuenta las cuestiones de género puede dar lugar a políticas sesgadas que no aborden las necesidades de todos los afectados por los conflictos.Las investigadoras son el puente entre los datos erróneos y las soluciones eficaces.Cuestionan los supuestos sobre los roles de género y garantizan que la investigación capte las diversas experiencias de todos los afectados por el conflicto.

Shutterstock 56953126
Fuente: Shutterstock

Un viaje personal: Habiba Paikan comparte su experiencia

Habiba Paikan, encuestadora de Adroit Associates en la provincia afgana de Bamyan, aporta una perspectiva personal al relato de las investigadoras y encuestadoras que trabajan en zonas de conflicto. Como una de las encuestadoras de Adroit, siento que es mi deber trabajar más duro para demostrar que podemos ser tan eficaces como cualquiera”, afirma. El compromiso de Habiba de llegar a las mujeres encuestadas, a menudo infrarrepresentadas en la investigación, la llevó a hacer un esfuerzo adicional para conectar con mujeres de distintas comunidades.

A lo largo del proyecto, tuve el placer de conocer a mujeres de todas las profesiones y condiciones sociales”, reflexiona Habiba. Habiba relata la resistencia y diversidad de estas mujeres, algunas al frente de sus hogares, trabajando en el campo, buscando comida en las montañas, etc., mostrando el espectro de funciones que las mujeres asumen en sus comunidades. Sin embargo, junto a estas historias de fuerza y resistencia, también encontró relatos de lucha y desesperación, que la llevaron a reflexionar sobre su propia vida.

Sistemas de apoyo y recursos

Los retos a los que se enfrentan las investigadoras sobre el terreno en zonas de conflicto requieren sistemas de apoyo sólidos y recursos adaptados a sus necesidades específicas:

  • Programas de tutoría: Establecer programas de tutoría que pongan en contacto a las nuevas encuestadoras/​investigadoras con tutores experimentados que puedan ofrecerles orientación, compartir sus experiencias de trabajo en entornos similares y proporcionarles apoyo emocional. Esta relación personalizada fomenta un entorno enriquecedor en el que las investigadoras sobre el terreno pueden aprender, crecer y afrontar las complejidades de sus funciones.
  • Formación sobre sensibilidad a los conflictos y análisis de género: La formación en sensibilidad ante los conflictos y análisis de género dota a las investigadoras sobre el terreno de las habilidades necesarias para llevar a cabo su trabajo con eficacia, sin perder de vista la delicada dinámica de las zonas en conflicto. Esta formación debe abarcar cómo abordar temas delicados, relacionarse con poblaciones vulnerables y recopilar datos desde una perspectiva de género.
  • Acceso a las redes: Proporcionar a las investigadoras sobre el terreno acceso a redes de colegas investigadoras tiene un valor incalculable. Estas redes ofrecen una plataforma para compartir experiencias, estrategias y consejos, fomentando un sentimiento de comunidad y solidaridad. Pueden ser un salvavidas en situaciones en las que las investigadoras sobre el terreno se enfrenten a retos propios de su género o necesiten asesoramiento sobre cómo afrontar problemas específicos en zonas afectadas por conflictos. Estas redes pueden adoptar diversas formas, desde foros en línea y grupos en las redes sociales hasta conferencias y talleres, lo que las hace accesibles a las mujeres incluso en los lugares más remotos o peligrosos.
  • Recursos y herramientas: Dotar a las investigadoras sobre el terreno de las herramientas y los recursos adecuados, incluido el acceso a las últimas tecnologías de investigación y recopilación de datos, herramientas de comunicación seguras y recursos para la seguridad personal, como formación en seguridad y apoyo psicológico. Los sistemas de apoyo y los recursos proporcionados a las investigadoras en zonas de conflicto deben ser integrales, polifacéticos y responder a sus problemas específicos.

Conclusión

Las investigadoras sobre el terreno en zonas de conflicto no sólo aportan una visión crítica de las experiencias vividas por mujeres y niños, sino que también garantizan que los esfuerzos de recuperación post-conflicto se arraiguen en las realidades de los más afectados. Invertir en ellas y apoyarlas no sólo es beneficioso, sino esencial para construir la paz y la resiliencia en las sociedades afectadas por conflictos.

Las organizaciones de investigación, los organismos de ayuda y los responsables políticos deben dar prioridad y aplicar estrategias que empoderen a estas mujeres, reconociendo sus contribuciones indispensables a nuestra comprensión de la dinámica de los conflictos y las vías hacia la paz. Asegurando una financiación específica, proporcionando formación especializada y fomentando entornos de investigación inclusivos, las investigadoras pueden estar equipadas, apoyadas y valoradas por su trabajo. Estas inversiones no sólo promueven la igualdad de género en el campo de la investigación de conflictos, sino que también mejoran la calidad y el impacto de los resultados de la investigación.

Sobre este tema