
El Proyecto de Riego del Canal de Qosh Tepa (QTCIP) es una de las iniciativas de infraestructuras más ambiciosas de Afganistán, destinada a transformar el paisaje agrícola de las provincias septentrionales del país. Como parte de una iniciativa apoyada por USAID en el marco del programa Strengthening Watershed and Irrigation Management (SWIM), se encargó a Adroit Associates la realización de estudios de viabilidad técnica exhaustivos para este proyecto crítico de infraestructuras hídricas.
De 2018 a 2021, Adroit llevó a cabo evaluaciones de viabilidad en profundidad para evaluar el potencial del canal para desviar agua del río Amu Darya para regar más de 500.000 hectáreas de tierras de cultivo. A pesar de las sensibilidades geopolíticas y los desafíos operativos -incluido el acceso limitado, los plazos ajustados y la compleja coordinación de las partes interesadas- Adroit produjo algunas de las evaluaciones técnicas más detalladas jamás realizadas en el sector del riego de Afganistán.
El estudio de viabilidad en dos fases examinó las dimensiones críticas del proyecto, como la hidrología, el diseño de ingeniería, la modelización del cambio climático, las evaluaciones de impacto ambiental y social, las estrategias de asignación del agua y el análisis geotécnico y del suelo. Nuestros hallazgos revelaron que Qosh Tepa, debido a su mayor altitud, podría soportar el riego por gravedad, un enfoque que ahorraría más de 590 millones de dólares en costes de capital y operativos en comparación con alternativas como el riego por elevación en Kaldar.
Los componentes técnicos clave del estudio incluían:
- Modelización hidrológica con HEC-HMS y WEAP
- Análisis del escenario de cambio climático (MCG CSIRO, RCP 6.0)
- Levantamientos topográficos, análisis de suelos y aguas (más de 100 pozos, más de 130 perfiles)
- Consultas sobre el impacto medioambiental y social con más de 15 comunidades
- Evaluación comparativa de los lugares de toma (Kaldar frente a Qosh Tepa)
Mientras que la recomendación de Adroit hacía hincapié en Qosh Tepa como el emplazamiento técnicamente óptimo, el gobierno afgano seleccionó finalmente Kaldar basándose en consideraciones de coste y logística. Esta divergencia subraya el equilibrio entre la ciencia de la ingeniería y la viabilidad política.
El estudio de caso no sólo pone de relieve nuestra experiencia multidisciplinar en irrigación, planificación de recursos hídricos y sostenibilidad medioambiental, sino que también refleja los retos de desarrollo más amplios a los que se enfrentan los entornos frágiles y afectados por conflictos.
Esta empresa es un testimonio de cómo el análisis basado en pruebas puede servir de base para las inversiones estratégicas en infraestructuras, incluso en los contextos más difíciles. Sirve de referencia para ingenieros, planificadores, agencias de desarrollo y responsables políticos regionales implicados en la planificación a gran escala de infraestructuras hídricas y resilientes al clima.